Un estudio nuevo describe cuatro protocolos breves de toma para realizar ecografías pulmonares en pacientes con COVID-19.
Los protocolos, desarrollados en la Universidad de Pavía (Italia), el Hospital General Valle del Serchio (Lucca, Italia), la Universidad de Trento (Italia) y otras instituciones, describen la mejor sonda para usar, dónde los médicos deben buscar artefactos, dónde establecer el foco y cómo visualizar la superficie más amplia posible con un solo escaneo. Los protocolos se basan en el hallazgo de que los pacientes con COVID-19 desarrollan un engrosamiento de la pleura, líneas B, consolidaciones subpleurales y otros artefactos característicos de la ecografía pulmonar.
Los cuatro protocolos de adquisición incluyen las siguientes recomendaciones:
• Uso de sondas lineales, ya que pueden capturar mejor el detalle de los artefactos pleurales y subpleurales; las sondas convexas también son apropiadas.
• Usar una modalidad de punto focal único en la línea pleural, en lugar de enfocarse en múltiples ubicaciones.
• Las exploraciones se deben realizar preferiblemente en los espacios intercostales, en lugar de una vista ortogonal de las costillas. Esto permite a los médicos ver la superficie más amplia posible con un solo examen.
• Se deben buscar artefactos en múltiples áreas y bilateralmente para ver la extensión de la superficie pulmonar afectada, específicamente en las secciones apical, medial y basal de las secciones paraclavicular anterior, mediaclavicular y posterior, y en las áreas axilares lateral apical y basal.
El estudio fue publicado el 20 de marzo de 2020 en la revista Journal of Ultrasound in Medicine.
“La ecografía pulmonar se puede usar para evaluar pacientes antes del ingreso al hospital, monitorizar pacientes con neumonía en el departamento de emergencias, controlar la ventilación y el destete para pacientes de la unidad de cuidados intensivos y evaluar los efectos de los medicamentos antivirales”, concluyó el autor principal, Gino Soldati MD, de la unidad de ultrasonido en el Hospital General Valle del Serchio, y colegas. “Esto se debe a que el ultrasonido puede identificar cambios en la proporción entre el aire, el tejido y el líquido en los pulmones de pacientes con COVID-19”.
Si bien la TC tiene una capacidad excelente para detectar la COVID-19, la modalidad no se puede usar junto a la cama de los pacientes y pone al personal médico adicional en riesgo de exposición al virus. Como resultado, algunos médicos en China, España e Italia han recurrido a la ecografía pulmonar como una modalidad alternativa de imagenología.
Fuente: Hospimedica