Un estudio nuevo revela que Clostridium difficile, una bacteria que causa diarrea debilitante, se ha convertido en dos especies separadas, con un grupo altamente adaptado para propagarse en los hospitales.
Investigadores del Instituto Wellcome Sanger (Hinxton, Reino Unido), la facultad de higiene y medicina tropical de Londres (LSHTM; Reino Unido) y otras instituciones, realizaron un gran análisis genómico a escala de 906 cepas de C. difficile aisladas de humanos, animales (como perros, cerdos y caballos) y el medio ambiente. Al secuenciar el ADN de cada cepa y al comparar y analizar todos los genomas, los investigadores descubrieron que el C. difficile clásico evoluciona actualmente hacia otra especie separada.
La especie emergente, C. difficile clado A, constituía aproximadamente el 70% de las muestras de los pacientes hospitalizados. El clado A tuvo cambios en los genes que metabolizan los azúcares simples, así como en los genes involucrados en la formación de esporas, dándole una resistencia mucho mayor a los desinfectantes hospitalarios. Un análisis más detallado reveló que, si bien el clado A apareció por primera vez hace unos 76.000 años, la cantidad de cepas diferentes comenzó a aumentar a fines del siglo XVI, antes de la fundación de los hospitales modernos. Desde entonces, este grupo ha prosperado en los entornos hospitalarios, con muchas cepas que se adaptan y evolucionan. El estudio fue publicado el 12 de agosto de 2019 en la revista Nature Genetics.
“Nuestro estudio proporciona evidencia basada en el genoma y en el laboratorio de que los estilos de vida humanos pueden conducir a las bacterias a formar nuevas especies para que se puedan propagar de manera más efectiva”, dijo el autor principal, Trevor Lawley, PhD, del Instituto Wellcome Sanger. “Mostramos que las cepas de la bacteria C. difficile siguen en evolución en respuesta a las dietas modernas y los sistemas de atención médica, y revelamos que centrarse en la dieta y buscar nuevos desinfectantes podría ayudar en la lucha contra esta bacteria”.
“Nuestro análisis genético a gran escala nos permitió descubrir que C. difficile actualmente forma una nueva especie, con un grupo especializado en diseminarse en entornos hospitalarios”, dijo el autor principal Nitin Kumar, PhD, del Instituto Wellcome Sanger. “Esta especie emergente ha existido durante miles de años, pero esta es la primera vez que alguien estudia los genomas de C. difficile de esta manera para identificarla. Esta bacteria en particular fue preparada para aprovechar las prácticas modernas de atención médica y las dietas humanas, incluso antes de que existieran los hospitales”.
C. difficile existe en el medio ambiente como una espora latente. Para colonizar el intestino, las esporas necesitan germinar y convertirse en bacterias activas productoras de toxinas. Los antibióticos que alteran la microbiota gastrointestinal facilitan esta germinación, permitiendo la infección por C. difficile, un problema importante de salud pública.
Fuente: Hospimedica.